(vaya hacia el sur hasta que la manteca se derrita, luego gire y elija su destinacion!)
Y eso estamos haciendo, hace ya algunos dias que la manteca que tenemos sobre la mesada de la cocina se derrite, hoy es practicamente liquida. Hace rato que estamos dentro a los tropicos cerca del paralelo 18 norte. Luego de navegar unas mil millas en direccion sud-sudoeste hemos cambiado rumbo y vamos en direccion oeste, con la proa apuntando a Saint Martin.
Antes de ayer un frente de tormenta que se formo un poco al norte nos redujo el viento obligandonos a encender el motor para poder mantener el ritmo de navegacion y llegar a destino en fecha. Esa noche por un par de horas llovio con una intensidad tal que el drenaje de una de las escotillas no dio a basto y el agua empezo a entrar en la sala.
Cuando me levante a las 6 para preparar el desayuno (era mi turno como cocinero) me encontre con ollas y baldes que, sin mucho exito, trataban de acumular el agua que entraba. Por suerte unos pocos minutos mas tarde dejo de llover y con un sol radiante y arcoiris mediante la catarata se freno y pudimos empezar a darle normalidad a la vida de la barca nuevamente.
Menu para el desayuno: porrige de avena. Almuerzo: pasta con salsa rosa y quesos gratinada en el horno. Postre: torta de bananas. La noche anterior cenamos sopa de pescado, aprovechando las sobras del pescado que habiamos comido antes. Pescado, dicho sea de paso, que nos regalo el atlantico, uno de los tantos. Por ahora tres dorados (de los cuales dos grandes y otro chico) y otro pez chico que nadie supo identificar, ni si quiera luego de haberlo placenteramente saboreado.
Tras pasar un par de dias de un calor insoportable ayer aparecieron dos ventiladores que intentan refrescar un poco el ambiente bajo cubierta. Queriendo se podria encender el aire acondicionado, pero nos resulta exagerado. Para comfort ya demasiado con los lavabos en cada habitacion, los tres baños (todos con ducha y uno con hidromasaje), el lavarropas y la lavavajilla. Por no mencionar la TV plasma de 40 pulgadas, heladera, freezer, y claro la conexion satelital que nos permite, entre otras cosas, recibir el pronostico meteorologico y actualizar este blog.
Lejanos en el recuerdo quedan esos dias en los que para hacer la guardia uno se ponia la campera y el gorro, ahora durante el dia no se puede estar al sol y a la noche solo mangas cortas. Con el correr de los dias todos empezamos a tomar un poco de color, quien mas moreno otros mas rojo camaron. Si todo sigue marchando como hasta ahora en unos 5 o 6 dias podremos desembarcar en las playas del caribe y lucir orgullosos nuestro bronceado.
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